
Problemas que tuviste si creciste siendo hija única
All the single children.
A veces, crecer siendo hija única no es nada más que felicidad. No tuviste que compartir tus juguetes, siempre te regalan cosas chidas por tu cumple y Navidad, no te dan ropa usada y eres la fav de mamá y papá.
Nunca falta quien llegue y te diga que le da envidia que hayas crecido siendo hija única. Y sí, es algo súper cool tener todo para ti y no preocuparte porque alguien agarre tus cosas o se coma tu torta, pero a veces ser hija única puede ser una experiencia muy solitaria y sobre todo durante la infancia.
No había a quien culpar cuando hacías travesuras
No podías jugar juegos de mesa a menos que te visitaran tus amigos
La gente automáticamente asume que fuiste consentida
No tenías quien te ayudara con tus quehaceres
Tus papás podían llegar a ser medio sobreprotectores
Te costó muchísimo trabajo apender a compartir
La gente no entiende lo sagrado del espacio personal
Odias tanta atención porque te sientes presionada
Pero cuando no te pelan, te sientes ignorada
Y aún así, a veces llegas a ser medio chiveada
Te aburrías fácilmente cuando salías de vacaciones con tus papás
No tienes quien te preste ropa cool para una fiesta
Tus papás te llaman todo el tiempo porque los traes con el pendiente
No aguantas tan chido el castre
Tratas a tus amigos como si fueran tus hermanos, aunque se saquen de onda
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